Hierbas anuales, decumbentes o ascendentes, glabras, sin látex; tallos largos, generalmente angulosos. Hojas alternas, compuestas; láminas 2-4-pinnatisectas, con los segmentos lobulados a casi partidos; peciólulos frecuentemente volubles. Inflorescencias racimosas, axilares o terminales, al principio densas, luego laxas, bracteadas. Flores zigomorfas, blancas, rosadas o purpúreas, generalmente más oscuro en el ápice de los pétalos, brevemente pediceladas; sépalos 2, ovados, lineares o lanceolados, subpeltados, caducos, el margen ± lacerado; pétalos 4, 2 externos: el superior generalmente mayor que los restantes, espolonado; el inferior cóncavo en el ápice, y 2 internos laterales, encerrando al androceo y gineceo; androceo diadelfo, formado por 2 columnas de 3 estambres cada una: la columna superior inserta en el pétalo superior y prolongada hacia dentro del espolón en un apéndice nectarífero; la inferior inserta en el receptáculo; cada columna con una antera central 2-teca y dos laterales 1-tecas; ovario 2-carpelar, 1-locular, 1-ovulado; estilo generalmente curvo hacia el ápice; estigma con una protuberancia central y 2 ramificaciones laterales, en las que se traban las anteras formando un solo cuerpo. Fruto un aquenio subgloboso a ovoide, liso o rugoso. Semilla elipsoide u ovoide, tuberculada a reticulada, dispuesta transversalmente en el lóculo.
Distribución:
Género conformado por ca. 50-55 especies euroasiáticas y de regiones tropicales de África oriental. En la Argentina crecen seis especies introducidas, y algunas de ellas se desarrollan como malezas frecuentes. Todas contienen alcaloides (especialmente protopina), con propiedades medicinales.
Publicación:
Sp. Pl. 2: 699. 1753
Observaciones:
Todas contienen alcaloides (especialmente protopina), con propiedades medicinales.