Plantas con rizoma muy corto, surcado de arriba abajo por dos hendiduras de donde salen las raíces dicotómicas. Licofilos
reducidos al raquis, dispuestos en forma helicoidal, formando rosetas, a menudo con la base alada o espatulada, siendo mucho más
ancha que la lámina, normalmente la porción distal subulada (súbula); con un haz vascular a lo largo del centro de la hoja, rodeados por
cuatro cámaras aéreas separadas por parénquima una de otra y divididas por septos transversales; estomas, cuando presentes, en
columnas opuestas a los canales aeríferos. Lígulas emergiendo sobre una depresión en la cara adaxial de la base del licofilo. Esporangios
solitarios, ovoides, trabeculados, ubicados en la base foliar, en fosetas (fóvea), cubiertos total o parcialmente por una membrana
delicada (velo), que deriva del tejido foliar; con lígula distal al esporangio a veces terminando en un apéndice globoso denominado
glosopodio; entre la lígula y el esporangio se origina también un corpúsculo laminar denominado labio o labium. Mega o microsporangios
numerosos. Megasporas triletes, tetraédrico-globosas, diversamente esculturadas, de 250-1200 µm. Microsporas monoletes, elipsoidales,
diversamente esculturadas, de 25-50 µm de diámetro mayor. Número básico de cromosomas x = 7-36.
Distribución:
Este género cuenta con alrededor de 350 especies en todo el mundo. En América se encuentra desde Groenlandia hasta la Región
de Magallanes en Argentina y Chile austral. Para la Argentina se han citado 8 especies. Estas plantas pasan inadvertidas y son poco
coleccionadas, se confunden frecuentemente con ciperáceas, gramíneas o juncáceas, una buena característica distintiva son las
hojas que en sección transversal muestran cuatro grandes cámaras aéreas septadas.