Plantas holoparásitas de raíces. Cuerpo vegetativo completamente subterráneo, compuesto sólo por un rizoma anguloso con raíces adventicias en sus vértices; del rizoma nacen pedicelos florales, asomando a la superficie del suelo sólo las flores coriáceas de color castaño-rojizo. Flores monoclinas; perigonio 3-mero, a veces 4-mero, raramente 2-mero, tépalos soldados en la base, formando un tubo de longitud variable, en cuyo borde superior se insertan 3 estambres opositépalos; filamentos estaminales muy breves, deltoideos, cada uno con uno de sus lados unido al tubo perigonial y el vértice opuesto llevando 1 antera extrorsa y concrescente con las otras, formando un cuerpo anteral tronco-cónico u ovoide, cada antera con varias tecas verticales de dehiscencia longitudinal; apéndices interestaminales 2-lobulados, ocupando un verticilo más interno y alternando con los estambres y los tépalos; ovario ínfero, en general 3-carpelar, con 1 solo lóculo completamente ocupado por numerosas láminas placentarias parietales, dispuestas verticalmente sobre toda la pared ovárica, la parte superior de las láminas placentarias no porta sacos embrionarios, soldándose por sus bordes con las que le enfrentan; superficie estigmática formada por el borde superior de las láminas placentarias libres que presentan pequeños lóbulos o pliegues; óvulos propiamente dichos ausentes, sólo quedan miles de sacos embrionarios embutidos en las láminas placentarias. Semillas pequeñas, con episperma faveloide, negras o castaño oscuras a la madurez.
Distribución:
Género de distribución americana, con tres especies, una de ellas se extiende hasta Costa Rica. En la Argentina habitan dos especies, preferentemente en regiones áridas y semiáridas.