Arbustos trepadores, raro hierbas perennes; tallos aéreos herbáceos o leñosos, por lo general con varias costillas o alas, los más
jóvenes pubescentes. Hojas solitarias o geminadas, pecioladas; láminas enteras, ovadas, angostamente ovadas o deltoides, base
truncada o desigual y ápice agudo. Flores solitarias, rara vez geminadas, péndulas; cáliz con tubo brevísimo, segmentos subiguales,
pubescentes, a veces con indumento glandular denso; corola con prefloración valvado-induplicada, tubo completamente urceolado
o cilíndrico e inflado en su parte basal y/o por debajo de la fauce, siempre más largo que los lóbulos, éstos patentes o reflexos,
tapizados en su ápice interno por tricomas cónicos 1- o pluriseriados, a veces bifurcados; estambres adheridos al tubo corolino muy
cerca del ápice o en el cuarto superior o apenas más abajo, porción libre de los filamentos glabra, espatulada en su extremo distal
(salvo en S. origanifolia donde es cilíndrica), anteras incluidas o alcanzando la fauce o exertas en ¾ de su longitud, tecas con algo
más de su cuarto basal libre; gineceo incluido o exerto, ovario 2-carpelar con nectario basal rojo, anaranjado o amarillento, bien
prominente (casi tan alto como el ovario), estilo glabro, por excepción pubescente, y siempre superando al androceo, estigma
subcapitado o globoso. Baya colgante, ovoide o elipsoide, pluriseminada, cubierta parcialmente por el cáliz acrescente; semillas
pequeñas, reniformes, envueltas por un velo blanquecino (paredes radiales y tangencial externa celulósicas); embrión circinado.
Número básico de cromosomas x = 12.
Distribución:
Género de unas 16 especies de los Andes sudamericanos, desde Venezuela hasta la Argentina, excepto por Salpichroa origanifolia
que tiene un área muy amplia por su carácter ruderal. En la Argentina crecen cuatro especies.